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From:
"Rodriguez-Mansilla, Fernando" <[log in to unmask]>
Reply To:
Rodriguez-Mansilla, Fernando
Date:
Tue, 21 Jun 2011 22:53:05 +0000
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text/plain (275 lines)
Estimados colegas:
Me aúno al debate, aprovechando que estamos de vacaciones y más inclinados
al ocio, en
el mejor sentido del término. Así, retomo algunas de las cuestiones que
propone Bryant Creel.

Me gustaría romper una lanza por la enseñanza de la literatura. Es cierto
que, en
los tiempos actuales, los departamentos de español corren el riesgo de
enfocarse puramente en la lengua y entregarse de manera frívola a propagar
la
³cultura², que puede afrontarse de muchas maneras, unas más productivas que
otras: desde hacer una presentación de comida, introducir un género
musical o
inclusive dedicar una lectura al lamentable ³botellón² ibérico. Depende de
nuestro criterio de educadores elegir lo mejor. Y sí, los estudiantes
adoran
que se proyecte películas en las clases y están dispuestos a criticar al
profesor en las evaluaciones de final de semestre si no incluyó ningún
filme.
¿Por qué? Tienen la sensación de que en esas dos sesiones no están
trabajando.
Personalmente, propongo siempre un trabajo escrito a partir de una
pregunta de
análisis que formulo a los chicos antes de que veamos la película. De esa
forma, se obligan a prestar atención a ciertos detalles y a tomar apuntes
de lo
que necesitan para desarrollar su tarea. Otras veces, cuando la película
supone
una adaptación de la obra leída, les propongo una comparación. ¿Cómo se
representó en la película la escena X? ¿Qué partes de la obra fueron
eliminadas, reducidas o amplificadas en la película?
Es indudable que el estudio de la literatura acarrea consigo una discusión
en
torno a la dimensión cultural que los textos pueden ofrecer, pero,
¡cuidado!,
no caigamos en el simplismo de explicar la literatura como reflejo
absoluto de
la cosmovisión hispánica. La casa de Bernarda Alba es una obra que permite
hacer aquella aclaración y que los estudiantes tomen conciencia de que la
literatura a veces implica una representación más compleja que la de un
documental. El estudio de la lírica del Siglo de Oro (los sonetos de
Garcilaso son un paradigma) permite reflexionar con los estudiantes acerca
de los gustos estéticos de la época: ¿Cómo era la mujer ideal del Siglo de
Oro? ¿Por qué todas las amadas son rubias? ¿Han cambiado mucho las
tendencias estéticas en torno al cuerpo? ¿Cómo nos enamoramos?
El trabajar con películas, con fines de motivación y respaldo de lo que
leemos, y
explorar la dimensión cultural de los textos son buenas estrategias para
involucrar más a los estudiantes y volverles atractivos los contenidos de
nuestros cursos (siempre hablando del nivel subgraduado). Sin embargo,
creo que
la base de nuestro trabajo cuando cubrimos literatura es enseñar a leer
literariamente, valga la redundancia. Me explico mejor: reconocer un tema y
explicar los recursos formales del texto (su forma) partiendo de dicho
tema. No
propongo nada más que seguir el método que propagaron Lázaro Carreter y
Correa
Calderón. He tenido muy buenas experiencias usando selectivamente
Aproximaciones (hay autores, como Vallejo, cuya obra está muy mal
representada), el cual abraza más o menos dicho método, para cursos
introductorios a la literatura hispánica. Me parece
necesario resaltar el valor de este método, ya que es un maravilloso
entrenamiento para familiarizarse con los recursos más expresivos y
estéticamente afortunados de la lengua. En un pasado no muy remoto, tuve
oportunidad de interactuar con estudiantes de postgrado y me resultaba
lamentable
comprobar que muchos mostraban una repulsión automática a todo lo que fuera
poesía. ¿Por qué? Ciertos profesores de postgrado dan por asumido que los
estudiantes saben qué es un hipérbole o una sinestesia (cuando suelen no
saberlo, por carencias de los estudios de pregrado) o, por el contrario,
eluden
cualquier análisis mínimamente formal y se dedican a ³deconstruir² o
divagar en
términos postmodernos o con el ³-ismo² que ellos abracen, a partir de
textos
que a menudo ni siquiera comprenden por completo en su sentido literal.
Como
resultado, o el estudiante no comprende de qué va la clase (porque no sabe
reconocer un hipérbaton ni mucho menos un encabalgamiento) o juzga el poema
como discurso ideológico sin apreciar su naturaleza genérica (sin lo cual
no le
encuentra gracia al estudio de la lírica, ya que no puede ver cuál es su
esencia). A riesgo de sonar reaccionario, creo que debemos recuperar el
goce
del texto en su principio más básico: disfrutar el verso de un poema o una
escena dramática en un relato. Para ello es necesario darles a los
estudiantes
herramientas y conocimientos que les permitan apreciar cómo funciona, en su
nivel de empleo más sofisticado, el literario, la lengua castellana.
Lamentablemente, analizar exclusivamente el contenido, dándole el giro
teórico o hermenéutico que forme parte de la agenda particular de cada
investigador, resulta más
sencillo que traer al texto de vuelta a la vida, explorando las
reverberaciones
que carga consigo.
Naturalmente, lo que digo es imprescindible para guiar al estudiante
subgraduado de español y probablemente a unos cuantos despistados de la
escuela graduada, pero no
cancela (por el contrario, alienta e impulsa) posteriores pesquisas, con
conceptos y elaboraciones críticas más elaboradas (personalmente me
resultan
atractivas la sociología a la manera de Pierre Bourdieu, los estudios del
espacio urbano y las formas autobiográficas) para abordar la literatura y
enriquecer el debate más especializado. Creo que en este aspecto, los
estudios
auriseculares, si se observan las recientes publicaciones, gozan de
vitalidad.
Aquel ³enseñar a leer literatura² es piedra fundamental en los programas
de español.
Creo que muchos de nuestros departamentos todavía se mantienen fieles a
esos
nobles principios y seguimos ofreciendo cursos de Siglo de Oro echando
mano de
películas, pinturas y música. Que esto sea posible y subsista depende de
nosotros mismos, tanto de los profesores jóvenes como de los más
experimentados, en diálogo y e intercambio mutuo.
Saludos cordiales,
 
Fernando Rodríguez Mansilla





On 6/20/11 7:47 AM, "Benjamin Torrico" <[log in to unmask]> wrote:

>Hiato doctrinal: No entiendo ya mucho de doctrinas, de hiatos acaso un
>poquitín. Veo uno bien claro entre una supuesta ideología, que se supone
>justifica todo un hacer político, y el renegar de ella y claudicarla al
>enfrentarse a la realpolitik. El hiato doctrinal no lo consagran
>movimientos como el 15M (casi me confunde de efeméride) sino que viene de
>atrás y se halla, claramente, entre quienes deponen lo doctrinal. No en
>otros que acaso buscan porque no les toca el mayorazgo.
>Nihilismo... Otro término peligroso. Recuerdo cuando el status quo
>tachaba de peludos, piojosos y barbudos a algunos que hoy utilizan esos
>mismos términos para referirse a los chicos de las carpas. Que por lo
>demás -y no seré yo quien defienda sus propuestas- tienen algunas cosas
>claras. No se puede llamar nihilista a quien, por ejemplo, es claramente
>asambleario. Tampoco andan poniendo bombas como los nihilistas
>caricaturizados por Daudet en alguno de sus Tartarines... Algunas de sus
>propuestas son clarísimas y yo diría que sensatas, hasta el punto de ser
>piedra angular de sólidas democracias parlamentarias en nuestro mismo
>hemisferio: reforma de reglamentos parlamentarios, listas abiertas,
>acabar con la disciplina de voto en los grupos parlamentarios... Otras
>parecen más irreales, casi cercanas al socialismo utópico. Pero no me
>parece que se puedan reducir, de un plumazo, a nihilismo.
>Si hemos de reflexionar, hagámoslo, pero detallada y conscientemente.
>Sugiero que evitemos los cajones de sastre. Y si hemos de hablar de
>hiatos doctrinales, hagámoslo pensando en cuantas instancias de hiato
>haya o haya habido, bramidos de monte que acabaron en parto de un mur; no
>con generalizaciones aplicadas sólo a parte del campo de observación
>(esto es un poco como estudio etológico) y a otras partes que acaso
>anteceden.
>En cuanto a esto ("esto") y la literatura, hemos llenado bibliotecas
>teorizando cómo el texto es la construcción de un espacio de agencia etc
>etc etc, cambiando terminología según la teoría al uso. No hace falta que
>glose más, creo. No debe sorprender que haya buenas gentes con buena
>intención que, cansadas de que no les llegue la subvención, respiren por
>la herida y busquen su "espacio de agencia".
>Lapso, hiato doctrinal... La inteligencia, en espacio de unos pocos años,
>ha declarado la muerte de Montesquieu, ha declarado muerta la historia,
>ha defendido el rizo del rizo del sistema liberal mediante la subvención
>a la banca, ha defendido tratados por los que unos gobiernos podían
>promulgar mediante tratado internacional una legislación que se impone a
>los propios parlamentos que se suponen soberanos... Demasiado juego de
>palabras para quien no llega a fin de mes. No nos creen y hacen bien: la
>culpa es nuestra. No hay mayor hiato doctrinal que el relativismo. Lo que
>vemos no (me) sorprende. Y no están tan desordenadamente hartos como para
>levantar barricadas, quemar tranvías, atentar... como ha hecho cualquier
>revolución de la larguísima lista de ellas, asentando sus actos
>revolucionarios en la lista de efemérides heroicas, escrita con tinta o
>con sangre. Esta gente -repito, buena- es mucho, mucho más sensata.
>Esto del hiato doctrinal me hace pensar en los proverbios de Sancho,
>ejemplo por otra parte de buen gobierno práctico sin cejar en principio
>alguno. El que se me viene a la cabeza es que si el abad juega a las
>cartas, los novicios qué no harán (no busquen vuesas mercedes si lo dijo
>o no el buen escudero, que pudiera haberlo dicho y eso es lo que hace al
>caso).
>La literatura tendrá que dejar de preocuparse por las guerras carlistas y
>aplicarse a los deshaucios de hogaño. En el mejor de los casos, poner el
>dedo en la llaga y dolerse con quien se duele, apuntando al abceso. En el
>peor, enfrascarse en una repetición de fazañas que distraigan de las
>penas nuestras de cada día y nos sigan afrimando herederos de la barba
>del Cid. La vida sigue y hay quien versa en el noble empeño de hacer de
>la necesidad virtud. La necesidad, a diferencia de la ideología (a las
>pruebas me remito), no es negociable. "Ningunear" (o "nadear", que eso es
>nihil) parece peligrosamente fácil cuando no se tiene un apercibimiento
>de un juez en el buzón.
>¿Revisamos los dedos en la llaga de nuestra flamante primera modernidad?
>A lo mejor aprendemos algo que haga al caso y convenga: Pasamontes hay en
>cada cuerda de forzados del Rey. Y Lázaros que no todos alcanzan oficios
>reales. 
>En otras palabras: no pasará nada con los clásicos. Segurán siendo
>clásicos, aunque cambien los formatos. Seguirán remitiéndose a ellos los
>nietos de quien los hubiere. Pariran nuevos vocablos, verán en ellos
>nuevos mensajes sobre nuevas circunstacias... Lo que iba a pasar ya ha
>pasado: nuestros alumnos resisten la lectura y celebran el cine, y
>nosotros, a regañadientes, les damos cada vez más lo que nos piden,
>animados por el mercado, por los administradores, por los números de
>matrícula. Pero los temas principales son los mismos, las mismas las
>esencias. Odres nuevos, pero sólo odres. Digo yo, y ya me mojo. Eso sí:
>habrá que buscar otros parámetros para nuestra profesión, porque lo de
>publicar negro sobre blanco ya ha cambiado.
>Vuelvo al hiato doctrinal y propongo mucha, mucha cautela. Enfáticamente.
>La vuelvo a proponer. Cuidemos el dolor ajeno como si fuera propio. Lo
>contrario es, en mi muy humilde y probablemente muy confusa opinión,
>flagrante hiato doctrinal.
>Cordialísimos saludos,
>
>Benjamin Torrico 
>Associate Professor of Spanish
>Kansas State University
>108 Eisenhower Hall
>Manhattan KS 66506-1003, USA
>785-532-6760 
>(Fax) 785-532-7004
>
>Dilige et quod uis fac.
>A. Augustinus 
>----- Original Message -----
>From: "Bryant L Creel" <[log in to unmask]>
>To: [log in to unmask]
>Sent: Sunday, June 19, 2011 4:41:33 PM
>Subject: Re: ¡Muchas gracias - Re: "Quijote modernizado"¡
>
>Queridos colegas,
>
>    Para complacer a nuestro inteligente colega Juergen y quizás invitar
>diálogo sobre cosas importantes y pertinentes al hispanismo académico,
>sobre todo el de la primera edad moderna, propongo un par de preguntas, o
>temas:
>    1. ¿Qué pasará con el libro --el objeto físico en general?  ¿Va para
>acabar ante las formas electrónicas y las conveniencias que éstas
>proporcionan?
>    2. ¿Qué pasará con la literatura?  ¿Va para acabar, reemplazada por
>cosas menos exigentes, como cursos sobre "cultura" y como ver cine en
>clase (mientras nosotros nos convertimos cada vez más en algo parecido a
>guías de turismo y maestros de lengua)?
>    3. ¿Qué pasará con el estudio de los clásicos (como Cervantes)?
>¿Será devorado por el posmodernismo y el mundo que lo parió?  [Estoy
>terminando de leer Padres e hijos de Turgenyev y creo ver bastantes
>semejanzas entre el nihilismo (la perspectiva de Bazorov), la apatía de
>nuestra época hacia la larga evolución cultural, y el hiato doctrinal
>entre los que ahora buscan ejercer una influencia progresista (15-M o
>indignados; alguien en la T.V. en España ha dicho que exigir cambio sin
>ser específico no puede llevar a nada)].
>
>Saludos,
>Bryant Creel 
>
>-----Original Message-----
>From: Coloquio Cervantes [mailto:[log in to unmask]] On Behalf Of
>Juergen Hahn
>Sent: Saturday, June 18, 2011 4:39 AM
>To: [log in to unmask]
>Subject: ¡Muchas gracias - Re: "Quijote modernizado"¡
>
>Estimados colegas:
>
>Muchísimas gracias por sus muchas amables respuestas, de parte de colegas
>antiguos y nuevos, tocantes a mi cuestión de un "Quijote modernizado".
>Sus sugerencias me van a ayudar mucho.
>
>Es tan bueno tener una red mundial de colegas comunicativos a quienes les
>gusta compartir su opinión sobre asuntos interesantes. De hecho, echo de
>menos un poco las vivas discusiones que tuvimos aquí hace unos años. Pero
>bueno, los tiempos cambian, y tal vez sea natural que la fascinación
>inicial del internet haya cedido a una normalización de nuestro discurso.
>
>Cordialmente,
>
>Juergen Hahn
>CCSF

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