Date: Wed, 01 Feb 2006 10:11:53 -0700
From: "K. Sliwa" <[log in to unmask]>
Subject: La religion islamica
 
Querido amigo Roberto,

Te pido enviar el siguiente mensaje al Colqouio Cervantes. Muchisimas gracias por todo y recibe un muy fuerte abrazo, Chris.
[Gracias, estimado Chris.  Se podría pensar también en el Abencerraje, obrita que tiene sus cosas pero de la cual se puede sacar cierta dignidad hacia el Otro.  Se podría decir que esta cortesía y generosidad es parte de la ética guerrera, tanto en períodos cervantinos como clásicos. Sin embargo, en tiempos modernos acaso hayamos perdido estos valores (no estoy seguro).  Cambios de recepción.  Saludos cordiales de ARL]

Queridas/os amigas/os,

Les envío una excelente observación de mi querido amigo Ahmed Abi-Ayad en cuanto a la religión islámica y al profeta. Querido amigo mío Ahmed tienes toda la razón del mundo y te agradezco de todo corazón esta muy magnífica contribución al Coloquio Cervantes y mi conocimiento, muchísimas gracias, Chris.

 “Incluso en medio de esta situación conflictiva, los personajes de Cervantes  son dignos de elogios y merecen un tratamiento respetable. Se observa en una escena, la intervención noble y heroica  de los protagonistas antagónicos – uno cristiano y el otro musulmán – Fernando y Ali Muzel que manifiestan entre ellos respeto y consideración. Es un árabe cortés y gallardo dice Fernando, y Ali Muzel contesta: “el cristiano no es un enemigo, lo contrario sí “o “pero Fernando no es mi enemigo, sino sólo mi adversario”

Notamos además que los respectivos profetas son citados con mucha reverencia y piedad.   Y en una despedida caballeresca entre los capitanes Guzmán y Ali Muzel, verdaderos héroes de las batallas, prevalece el respeto mutuo de sus respectivas religiones con estas expresiones sorprendentes e insólitas a la vez: Guzmán se despide con estas palabras:  “Ali que Mahoma te protege”  y Ali Muzel le responde:  “que tu Cristo sea contigo

Todas estas reacciones y sentimientos, puestos de manifiesto en esta  pieza, dejan claro, a mi parecer, la actitud de los personajes como la del autor, frente al desastre inútil de estos enfrentamientos. Se rechaza la guerra en favor de una paz y reconciliación entre los hombres , y el mejor testimonio y lección de Cervantes, aparecen en estas formulas  religiosas que ambos protagonistas proclaman, en una época de máxima ortodoxia religiosa. ....”

En efecto, el  recurso a expresiones e símbolos de la civilización musulmana son una prueba tajante de la clarividencia y conciencia cervantina con respecto a su fundamento liberal y progresista. La familiar exclamación española ójala de uso muy corriente como la abundante referencia a Allah y al profeta Mohamed, representan un elemento bastante evidente en las entrañas y  profundo sentir de Miguel de Cervantes. Un estudio riguroso sobre los personajes históricos mencionados en sus obras, presenta al profeta Mohamed como el personaje más citado por Cervantes.  (Armando Cotarelo ). Lo que nos hace meditar sobre esta cuestión .

Evidentemente, Cervantes quiere apuntar aquí la barrera religiosa que no debe en realidad impedir ni romper la amistad y las relaciones humanas entre los hombres. Alusión perspicaz a la tolerancia por encima de todas consideraciones. Y frente a la ley de la fe propone Cervantes la de la razón..  En esta nueva “frontera “de Oran, cuya comedia el Gallardo Español, pone en evidencia la confrontación  entre cristianos y musulmanes, Cervantes adopta una postura neutra, porque nadie  puede convencer al otro  de “las verdades de “mi sacra religión”.

Los años de cautiverio  fueron trascendentales en la vida espiritual e intelectual de Miguel de Cervantes. De ahí, saca una experiencia amplia y diversa sobre los comportamientos humanos cuya sagaz reflexión consiste en valorar a los hombres no por su carácter religioso sino por su dignidad y actitud caballeresca.  Pues, la nacionalidad y la religión, en sí, no son determinantes de la bondad o villanía de un personaje.

Para Cervantes el ser cristiano no significa nada. Hay cristianos buenos y cristianos malos, infieles buenos e infieles malos.  No es la religión practicada lo que distingue a los hombres sino sus obras y acciones. Hasta un renegado es hombre de bien  porque siempre  ha hecho bien a los cristianos, es decir ha tenido una conducta humana  con los demás. Esto mismo dirá Sancho de otro renegado: “...y yo me atengo al renegado, que me parece muy hombre de bien y de muy buenas entrañas”.  

 Escéptico, tolerante y pacificador, parece ser la posición inteligente de nuestro dramaturgo. Sin ningún tipo de “ dudas”  y a pesar de frases o formulaciones concretas - meramente retóricas  o secundarias en su expresión literaria -, como puestas adrede  y hasta resaltadas como defensa ante posibles sospechas que su actitud pueda despertar en un momento de ardor patriótico-católico muy exacerbado . 

Las referencias de nuestro querido Profesor Ahemd Abi-Ayad están sacadas de una comunicación suya leída en el Congreso de Sevilla sobre “Cervantes, El Quijote, lo moro, lo morisco y lo aljamiado,   19 al 21 mayo 2005”   con el título siguiente