Date: Mon, 01 May 2006 12:34:46 +0200
From: Luis Miguel Vicente <[log in to unmask]>
Subject:
 RE: De Sofía Cedazo Espinosa al colega X: Coloquio Cerva
        ntes
To: "A. Robert Lauer" <[log in to unmask]>
X-Mailer: Microsoft Outlook Express 5.00.2314.1300
X-BrightmailFiltered: true
X-Brightmail-Tracker: AAAAAA==
Original-recipient: rfc822;[log in to unmask]
X-OriginalArrivalTime: 01 May 2006 10:26:11.0729 (UTC)
 FILETIME=[AAFA2010:01C66D09]

 
----- Original Message -----
From: A. Robert Lauer
To: [log in to unmask]
Sent: Monday, May 01, 2006 2:09 AM
Subject: Fwd: De Sofía Cedazo Espinosa al colega X: Coloquio Cervantes


Mi explicación sin solfa es esta:

 

La semana pasada leo en el foro un mensaje del Sr. Espejo en respuesta a una carta amable del Sr. Juergen al Sr. Maestro, que me molestó porque cuestionaba la capacidad pedagógica del Sr. Juergen y tachaba su mensaje de dislate pedagógico, y todo porque expresaba sus ideas sobre el diferente efecto de las corrientes críticas en EEUU y Europa, ideas que describían bastante bien la realidad, aunque fueran necesariamente generalizaciones, y que en ningún caso merecían que se despreciaran atacando lo más sensible: nuestra capacidad pedagógica, que al fin y al cabo es de la que vivimos y por la que vivimos probablemente los más de los asiduos a este foro.

Así es que aunque no había participado nunca en los debates de la lista, contesté impulsivamente y encomendándome a lo que entiendo más abominaba Cervantes, y entré en esa justa ficitcia en la que el Sr. Juergen agradecía al Sr. Maestro su intercambio de pareceres, convirtiendo a todos en caballeros y valiéndome del exabrupto quijotesco que para decir algunas verdades sirve. Quería ponderar la rabia que había sentido por el mensaje del sr. Espejo hacia el Sr. Juerguen y de paso incluí al Sr. Maestro en mi recreada justa, no en su caso porque haya nunca faltado al respeto a nadie ni deje de tener enjundia lo que propone, sino porque tras haber leído varias de sus intervenciones me parecía uno de los contrincantes dialécticos más aferrados al para mí "catecismo" de la crítica literaria racionalista, por nombarlo de alguna manera. Y puesto en la solfa quijoteseca, me parecía que podía decir que antes se dejaría sacar un ojo que cuestionar sus teorías. Discúlpeme si con este registro herí lo que dicho con sinceridad me parece respetable, aunque como el propio Juerguen le decía en otra, la filología para iluminar los textos cuenta con recursos que no son fácilmente reducibles a fórmula ni a tratado, y citaba el sr. Juerguen la sabiduría de algunos filólogos como Márquez Villanueva y otros que no son precisamente teóricos de la literatura. La palabra razón, como todas las grandes palabras, es de uso peligroso, no debemos apropiárnosla sin más y hacer de ella escuela. Porque la razón hay que dejarla a la anchura del que entiende, como al amor, sin que podamos encerrarlos en catecismos... afortunadamente.

 

La Sra. Sofia me pareció que no entendía por qué yo hablaba de "infulas académicas", no me refería a lo mejor o peor que cada cual quiera compartir aquí de lo que entiende, me refería precisamente a la manera del Sr. Espejo de descalificar al Sr. Juerguen poniendo en tela de juicio la fortuna de sus estudiantes... y en al uso de las armas de las letras, que en ese momento y por ese motivo me trajeron a la mente la ejemplaridad del Licenciado Vidriera, su desencanto sobre el mundo de las letras y corte y su preferencia por la vida de soldado de la que nunca había querido participar. Elección simbólica, como el menor mal posible, y como siempre en Cervantes, no tanto rechazo de las letras como de muchos de los que actúan en nombre de ellas. Y a ello me adscribo yo también, las letras sí, pero las ínfulas no.

 

Disculpas por el sermón, que como dije en otra, no tengo Cipión que me asista.

A todos con afecto.

 

Luis M. Vicente